Existen diferentes diseños y configuraciones, que incluyen:

• Boquillas de disco: Utilizan un filtro en forma de disco, generalmente compuesto por una malla fina con orificios pequeños que retienen eficazmente las impurezas.
• Boquillas especiales: Diseños específicos que ofrecen una mayor eficiencia de filtración para aplicaciones particulares.
• Filtros de punta: Se instalan en la punta de la boquilla para realizar una filtración final justo antes de la inyección en el molde.
• Boquillas de gran disco: Emplean un disco de filtro más grande para maximizar la superficie de filtración.
• Boquillas combinadas (Filtro y Boquilla): Un diseño de extensión donde el flujo de plástico se divide en espacios estrechos para la filtración. 

Estos tipos pueden combinarse con los diseños de boquillas de inyección tradicionales (abiertas, de conicidad inversa, etc.) para adaptarse a los diferentes requisitos de viscosidad del material y del molde. 

Las boquillas con filtro se utilizan en una amplia gama de aplicaciones de moldeo por inyección, especialmente cuando la pureza del material es crítica o se procesan materiales con impurezas inherentes: 

• Procesamiento de plásticos reciclados: Son fundamentales para eliminar contaminantes y arena del plástico reciclado, protegiendo tanto el molde como la máquina.
• Materiales con aditivos o cargas: Ayudan a retener aglomeraciones de aditivos o partículas que podrían afectar la calidad superficial o la integridad estructural del producto final.
• Aplicaciones de alta calidad: Se emplean en la producción de componentes donde la presencia de defectos visuales o estructurales debido a impurezas es inaceptable.
• Protección del molde: Al filtrar partículas, previenen daños en el casquillo de inyección y otras superficies delicadas del molde.
• Sistemas de canal caliente: Se pueden adaptar para filtrar el material antes de que entre en el sistema de canal caliente, que es propenso a obstrucciones.